El 6 de mayo de 2016, el Diario de Yucatán publicó la siguiente información:
Roger Menéndez Rodríguez
Viernes, 6 de mayo de 2016 - Edición impresa
Después de larga dolencia, y a la edad de 77 años, en las primeras horas de ayer jueves se desligó de la vida en esta capital el periodista Roger Menéndez Rodríguez, ex subdirector de la revista capitalina “¿Por qué?”.
Nieto del fundador de Diario de Yucatán, don Carlos R. Menéndez González, y su esposa doña Flora Romero Rodríguez, fue el tercero de los hijos del matrimonio que formaron los señores Mario Menéndez Romero y profesora Pilar Rodríguez Cantillo.
Les sobrevivía a sus hermanos Agustín Ramón, quien falleció el 2 de diciembre de 1998; Eduardo Ramiro, el 31 de enero de 2000; Hernán Raúl, el 6 de enero de 2002, y Juan Rodrigo, el 21 de diciembre de 2011.
El cuerpo fue incinerado en el complejo “Ethernus Funeral Home” (en la comunidad de Santa Gertrudis Copó) y las cenizas permanecerán bajo el resguardo de sus familiares.
Se oficiará una misa en sufragio de su alma en la capilla San Jorge (en la colonia Villas del Sol) hoy a las seis de la tarde, a cargo de su sobrino el presbítero doctor Jorge Carlos Menéndez Moguel.
Entre otros deudos, le sobreviven sus hijos Roger y Gabriela Menéndez Hernández, y Eduardo Menéndez Díaz; hija política Lourdes Reyes; hermanos Mario Renato y María del Pilar de Triay; hermanos políticos Alicia Figueroa González, Manuel Triay Peniche, Guadalupe Cámara Monsreal y Silvia Reyes Bolio; nietos Vallado Menéndez, Menéndez Villavicencio y Menéndez Reyes; sobrinos Menéndez Cámara, Fáller Menéndez, Menéndez Cantón, Menéndez Reyes, otros Menéndez Cámara, Menéndez Guevara y Menéndez Figueroa, y demás familiares, quienes reciben las condolencias de las personas de su amistad,
Y el Por Esto! lo siguiente:
Falleció Roger Menéndez Rodríguez
Hoy en la madrugada, a los 77 años de edad, se despidió todo un Periodista, un hermano insustituible y un luchador indomable
Lector, ha muerto todo un Periodista, un hermano insustituible y un luchador indomable: Roger Menéndez Rodríguez.
Escogió la madrugada de hoy 5 de Mayo para librar la última batalla de su vida. Coincidencias con la Historia, pero así también fue su vida como Periodista, siempre al lado de su hermano Mario, Director de los Diarios POR ESTO!, continuación de la Revista POR ESTO! y de la mil veces heroica POR QUE?, como antes también al frente de SUCESOS y en la Redacción del Diario de Yucatán.
Se fue un hermano, NO sin antes haberse despedido con el mismo cariño de siempre, la dedicación a la profesión familiar, heredada de otros grandes del Periodismo yucateco y nacional.
Tenía 77 años cuando se despidió de nosotros, para reunirse con nuestros padres: la Maestra Pilar Rodríguez Cantillo y el Periodista Mario Menéndez Romero.
Sí quisiéramos decirle al lector que Roger fue algo muy especial para su hermano Mario, tan especial que en tiempos de la represión más aguda, en el México de 1968, los servicios policíacos nunca supieron identificar quién era quién en los momentos más cruciales.
Así, NO pocos de los trabajos realizados durante los aciagos días de 1968, como antes, desde 1965 y también entre 1958 y 1964, hubiesen sido imposibles de realizar de NO haberse registrado una identificación plena en el ejercicio del Periodismo entre Mario Renato y Roger. Uno en el campo de la acción directa y el otro en la retaguardia. Fueron años maravillosos nunca antes registrados en el Periodismo Auténtico, que en estas líneas rinde homenaje al grande que fue Roger.
Ni secuestros, ni torturas, ni acoso permanente pudieron doblegar a los hermanos que rindieron culto a la profesión de los mayores.
Al ex Subdirector de las Revistas POR QUE? y POR ESTO! le sobreviven sus hijos Roger y Gabriela Menéndez Hernández y Eduardo Menéndez Díaz, así como sus hermanos Mario Renato y María del Pilar Menéndez Rodríguez; hermanos políticos, nietos y sobrino-nietos, que hoy reciben el más sentido pésame del extenso círculo de sus amistades, que los POR ESTO! se honran en presidir.
Su cuerpo es velado en la funeraria Ethernus, ubicado en la calle 2-A por 9 y 9-A, Santa Gertrudis Copó.
Al querido hermano se le abraza con cariño y su presencia se sentirá con el grito que siempre nos identificó: Hasta la victoria siempre y para atrás ni para coger impulso.
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